Mi profesión: mi deporte
En el deporte hay deportistas de alto rendimiento y de mediano rendimiento, lo mismo sucede en las profesiones, la diferencia radica en una mezcla de enfoque, disciplina y mejoramiento.
¡Cuánta admiración nos despierta un deportista!
Cuando vemos a un deportista entrenando fuerte, con mucha disciplina, mejorando día a día y alcanzando sus metas, realmente nos inspira, en el fondo queremos ser como ellos.
¿Por qué no pensamos así cuando se trata de nuestras profesiones?
Un deportista tiene entrenadores, un profesional tiene jefes y líderes.
Un deportista trabaja para uno o varios equipos, un profesional para una empresa y un equipo de trabajo.
Un deportista entrena 8 o más horas diarias, un profesional dedica 8 o más horas diarias a su profesión.
Un deportista estudia cómo mejorar su técnica, un profesional tiene a la mano infinidad de estudios para mejorar sus conocimientos y técnicas.
Un deportista puede cambiar de equipo y escalar de categorías, un profesional puede crecer profesionalmente, cambiar de empresa o tener su propia compañía.
Un deportista construye un camino de crecimiento esforzándose cada día más, un profesional debe formarse a través del tiempo, las experiencias y el conocimiento.
Un deportista con el paso del tiempo se convierte en un líder de su campo, un profesional puede escalar a cargos de alta responsabilidad o ser el gerente de su propia compañía.
Un deportista hace que su deporte sea parte de su vida, un profesional también puede hacer de su profesión su pasión, su vida.
Un deportista se relaciona con los mejores de su campo, un profesional puede usar el networking para fortalecer sus relaciones sociales.
Un buen deportista inspira a otros deportistas, un buen profesional inspira a otros profesionales.
Entre mejor sea un deportista, mejor es su recompensa económica. Un profesional entre más capacitado esté para liderar y resolver los problemas más importantes de una compañía, mejor será su beneficio económico.
En el deporte hay deportistas de alto rendimiento y de mediano rendimiento, lo mismo sucede en las profesiones, la diferencia radica en una mezcla de enfoque, disciplina y mejoramiento.
¿Cuál tipo de deportista eres tú en tu profesión?
Sea donde sea que te desempeñes, en una empresa pequeña, mediana, grande, o en un emprendimiento, convierte tu profesión en tu deporte, indistintamente de la posición que ocupes hoy, piensa y actúa como un deportista de alto rendimiento.
Se consciente de que hay que tener un proceso de crecimiento, si esperas obtener resultados diferentes a los otros deportistas, debes entrenar más fuerte, mejorar la técnica, rodearte de los mejores.
Piensa y construye para ti, siéntete orgulloso de tu proceso y de tu crecimiento.
Sé un deportista, uno de alto rendimiento.